El padre de Rajoy.

El periódico digital eldiario.es ha sacado a bombo y platillo la exclusiva de que Rajoy ha cargado al presupuesto de Moncloa la atención de su padre, una persona dependiente, de 95 años y con un ictus, que está integrado desde hace años en la unidad familiar del presidente y que requiere cuidados continuos. El reportaje enfatiza que esos cuidados no están incluidos en el concepto de asistencia sanitaria a la que tiene derecho el presidente y su familia, y a continuación alude a la "indignación" de familias con personas dependientes que no pueden hacer valer los derechos que les confiere la Ley de Dependencia por falta de presupuesto.
 
Me parece un error tremendo y decepcionante de eldiario.es (un periódico imprescindible) llevar a primera página esta "exclusiva" a modo de denuncia. No puedo entender que se reproche al presidente que acoja en su unidad familiar, con todas las consecuencias, a su padre y que le dispense con el presupuesto de Moncloa (que no se incrementa, sino que se distribuye en unas partidas u otras) un gasto moderado consistente en dos empleados a tiempo parcial.
 
Un Presidente del Gobierno vive en el Palacio de la Moncloa y obviamente no paga de su bolsillo el alquiler del palacio, ni la comida que le sirven a diario, ni el servicio de limpieza (de sus zonas comunes y de sus habitaciones privadas). Rajoy no paga el papel higiénico, ni la electricidad que consume, ni al barbero que lo pela, ni al asistente que le elige la indumentaria. Todo eso es normal, y nos parece normal, y difícilmente encontraremos un país en el que no suceda así. Y sin embargo el periódico quiere que nos escandalicemos porque no pague de su bolsillo algo mucho más importante como es que su padre, que vive con él, esté bien atendido. "Que se lo pague él, como todo ciudadano", parece estar queriéndose decir. Pero ese argumento igualitarista, más bien simplón, no se esgrime para tantísimos gastos imaginables de Moncloa que los ciudadanos normales pagamos con nuestro dinero. Me van a perdonar el ejemplo, pero lo pongo a propósito: no sé si Rajoy tiene un perro, o un gato, o un hámster, pero estoy seguro de que, si lo tiene, los cuidados de ese perro o de ese animal van a cargo de Moncloa. Bah, eso parece normal. Pero si es un padre de 95 años, entonces salta el escándalo.
 
No se me escapa el trasfondo de la noticia. Imagino que lo que eldiario.es persigue es llamar la atención sobre el descuido de la atención a la dependencia, aquel "cuarto pilar" del Estado del bienestar que parece postergado del plano de los derechos al plano de las buenas intenciones. Suscribo esa preocupación. Es más: me parece uno de los aspectos en los que más puede y debe avanzarse políticamente, en esta sociedad tan proclive a defender a los consumidores, y tan cicatera a la hora de suministrar entornos dignos a los viejos y a sus cuidadores. Será uno de los aspectos en los que me fije a la hora de ir a votar. Pero el cebo utilizado para llamar la atención sobre el importante descenso en este Legislatura de la dependencia en el ranking de preocupaciones políticas me ha parecido distorsionador y equivocado. En vez de una exclusiva con intención de provocar un escándalo, habría sido mucho mejor, mucho más positivo y eficaz, pienso yo, manifestar, quizás -si se quiere- con cierta ironía, que Rajoy ha sabido jerarquizar en qué debe gastarse el dinero asignado por Presidencia para las atenciones del Presidente y su familia.

2 Respuestas

  1. El otro día cuando leí la gran exclusiva de eldiario.com, me quedé largo rato pensando. No sabría decir la razón….por un lado, me parecía una indignidad para demostrar la torpeza o la sinvergonzonería de un político, el hablar de los gastos de cuidados a su padre, al que lleva a la Moncloa y que pagamos entre todos; por otro, entendía el razonamiento del periódico, de lo paradójico que un gobierno que ha dinamitado la ley de dependencia, tenga a un presidente que se ahorra mensualmente una cantidad que normalmente costean las familias dentro de sus posibilidades, a cargo de los presupuestos. Ha sido leerte y me ofreces la respuesta, lo que agradezco, y te robo tus razonamientos, siempre ponderados. Como ciudadana, ¿puede dolerme más que del presupuesto de Moncloa se costee el cuidado de un anciano de 95 años que convive con su familia o que se gaste dinero en botellas de vino carísimas o helados de una marca concreta para lo que tenían que salir corriendo a comprar, sea la hora que fuere, el personal de la casa? o como bien dices, los cuidados de animales de compañía, gastos de peluquería, manicura o lo que fuere? ¿Es un error plantear que la noticia es miserable o pensar que el diario actuó correctamente? De eso me queda duda. Agradezco la información pero me resisto a que sea usada como arma arrojadiza. Habrán tantas armas arrojadizas!

  2. Gracias, Patricia. Comparto ese punto de perplejidad (es decir, esa actitud que te pone difícil reaccionar de una manera o de otra). Quizás el principal error estuvo en darle a la noticia el formato típico de los "escándalos políticos". Desde luego, yo habría agradecido más esa información en un artículo o especial sobre el abandono de la ley de dependencia. Saludos!

Deja tu comentario

Los comentarios dan vida al texto y lo pone en movimiento.